Candidatos con viejas mañas ¿para lograr un cambio?
POR MIGUEL II HERNÁNDEZ MADERO
Las campañas están en marcha, en un ambiente muy
difícil con desplome económico, pandemia, desempleo e inseguridad en aumento,
pero los candidatos parecen no darse cuenta de que la política a la vieja
usanza resulta muy cuestionable, por decirlo amablemente.
Es un proceso intermedio en el que hay mucho en juego.
Varios sectores le apuestan a que si Morena deje su hegemonía los problemas
sociales se solucionarán, otros señalan que únicamente con la continuación de
la Cuarta Transformación se logrará “un México mejor”. A eso sumémosle la
postura de quienes se quejan y su solución es NO VOTAR, no hacer nada esperando
que haya un cambio…, también eso es cuestionable.
Pero hay un detalle, del que casi no se habla: tenemos
a los mismos políticos y las viejas mañas, una combinación que de ningún modo
traerá cambios, porque o son los mismos personajes, o es la misma forma de
hacer política. Vamos, ni siquiera tienen claro qué implica la palabra
“política”, y lo toman como el trabajar dentro del paraíso de alguna nómina y
vivir del erario, pero eso es ser Servidor o Funcionario Público, como quieran
llamarlo, no es ser Político.
Pero en intento de descargo los mismos nombres que
encabezan las listas tienen ahora como justificación que ya están en otro
partido y con ello se han renovado. Lamentablemente no es tan fácil, vemos que
no importa el color que ahora porten en sus camisetas, siguen con los mismos
vicios y lo peor, es que los escasos aspirantes nuevos o formados al vapor,
tienen la misma escuela. La Sociedad espera cambios, pero
difícilmente los habrá porque se seguirán haciendo las cosas de la misma forma.
Reitero, no se puede esperar a cambiar con que Morena
pierda o no la mayoría en el Congreso, si tendremos al mismo tipo de políticos,
haciendo las mismas cosas, con su mismo adoctrinamiento (sin ideología, sólo
conveniencia). Y veremos el mismo desfile de gente recurriendo a rituales
ancestrales para “ganarse a la gente”, aunque a muchos les parezca una burla,
comiendo tacos en mercados, retratándose en carreteras desiertas, en medio de
henequenales o debajo de algún árbol, con discursos triunfalistas y sonrisas
huecas. La vieja forma de “hacer política”, pero que nada aporta y
en nada contribuye a aclarar el panorama.
Yucatán tiene más pobres, tiene más desempleo, más
población vulnerable y en vez de tener programas de apoyo a la producción o
asistenciales, se ha recurrido a programas de promoción muy cuestionables y sin
planeación adecuada. Vemos viejos nombres priístas en todas las
plantillas electorales, con diversos colores, pero son los mismos personajes ¿y
los militantes de a pie? Bueeeno, esos deben aguantarse o emigrar, total
siempre habrá quienes crean, porque existe la necesidad de creer.
Pero es mejor votar y repetiré lo que dijo uno de mis
jóvenes alumnos que irá a las urnas por primera vez en su vida: “ahora no es
votar por el menos malo, es votar por el menos peor”. Triste, pero es algo muy
cierto.
Hasta la próxima…
POR MIGUEL II HERNÁNDEZ MADERO
#OPINIÓNPORMIGUELIIHERNÁNDEZMADERO
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